Hay Rock

Hay que poder decir con toda claridad, la sobrada capacidad del amigo Fito para generar un espacio con tanta cordialidad, alegría y ganas de repetir cada viernes el rock que propone: con toda la furia imaginativa y el placer sublevado al servicio de todos los presentes. Fito nos parece decir que la mejor defensa a la lenta entrega de los años, es un buen zapateo sin miedo a terminar en el piso. Y si estamos así de vivos, es que en algo estamos de acuerdo: si vamos a morir, que sea bailando un buen rock and roll, y si son con los clásicos de Fito Manía, mejor!!!. Hasta el próximo viernes amigos!!!.


La furia imaginativa y el placer sublevado que propone Fito cada viernes, son momentos intransferibles que no se pueden contar sin haberlos vivido y si acaso tuviste la oportunidad de vivirlos, resulta imposible contarlo porque como ya dije, son momentos intransferibles. Aguante el Rock and roll... hasta que los cordones nos separen!!!.

mejor!!!. Hasta el próximo viernes amigos!!!.


Aldo

lunes, 21 de septiembre de 2015

HAY ROCK (27) No sabía nada de eso hasta que observé con atención.


No sabía nada de eso hasta que observé con atención.

LA TOALLA HEROICA
Cuando las piernas deliran anárquicas de tus decisiones, es porque se afiebraron de rock. El frío se rinde al ritmo, aumenta la temperatura y la transpiración irrumpe en un compacto aguacero que se aferra pegajosa y distribuyéndose en todo cuanto tengas puesto. Y la verdad, poco se puede hacer ante tanta catarata de masa hídrica. 
Ella hace esto: Luego de haber pateado lo suficiente, gana la mesa para sepultar su rostro empapado en una toalla como si fuera un santo sudario, que se acomoda justo a su forma, hasta grabar, toda su anatomía frontal. El secreto es, para qué?: y la respuesta es que la diminuta toalla, ahorra viajes al tocador. Como si fuese un pequeño tratado acerca del esfuerzo realizado en una noche calurosamente interminable, tenemos un rostro embebido en sudor que se escurre rápidamente recuperando la piel seca una y otra vez. Una suerte de trasplante transitorio a la que es sometida durante toda la noche y se la banca porque sino: - “de qué clase de toalla estamos hablando!”- (Diría si pudiera, la toalla, claro). De madrugada, perderá sus fibras absorbentes y no habrá nada más que hacer. La amiga –especulo- lo tendrá calculado, porque para cuando la toalla no de más, serán las cuatro de la mañana, donde la rockera tampoco dará más y será el momento justo de guardar esa heroica tela en la cartera e irse sin una sola gota derramada, que revele la increíble noche fitomaníaca que pasó. Lo dicho: cuestión de prestar atención.

Sabado 26 de septiembre









Ateneo don Bosco - 20 de septiembre








Indice - Hay Rock

HAY ROCK (26) Aritmética-dance: El lado matemático de la salud rítmica.


Aritmética-dance: El lado matemático de la salud rítmica.

AL EPOC?, ROCK!.
Sin ningún ánimo de ponerme en contra de las campañas contra la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), tengo algo que decir: con 55 años de edad y próximo a cumplir 100 en 45, puedo afirmar que el envejecimiento no parece ser tan alarmante como imaginé hace 15 cuando con 40, parecía que los 50 serían el principio del fin. Y no. Hace 5 que descubrí que 50 es tan solo la mitad de 100. Redondeando y sin tener ningún accidente cerebrovascular que reportar y tras haber fumado un 90% más de lo deseado, digo que en estos últimos 180 días he ido a bailar 24 viernes consecutivos, promediando 50 canciones cada noche o 1.200 Presley, Bill Haley, Credence, Beatles, Lee Lewis -entre muchos otros-. A 3 minutos de duración, ya no estaríamos hablando sino bailando 60 horas. Para 6 meses, 7 rock por día no parece ser poco ejercicio. 21 minutos diarios, están muy por encima de los 10 recomendados para sentirme como me siento hoy: mejor que ayer y todo gracias a los vinilos que girando a 33 revoluciones por minuto en las infernales bandejas Fitomaníacas, alegran mis pulmones que sujetos a ciertas variaciones, no paran de aspirar e inspirar en intervalos de 16 veces por minuto. Y la terminó acá, antes de que me quede sin aire.
Saludos rockeros.

HAY ROCK (25) Con el rock Fitomaníaco de los viernes rumbo a Castelar Sur.


Con el rock Fitomaníaco de los viernes rumbo a Castelar Sur.




EN EL ROCK NO HAY SECRETOS. HAY DECISIONES Y SE TOMAN

Tengo la curiosa idea y ninguna certeza de que las cosas no son ni caras ni baratas. Sirven o no. Porque como ya he dicho repetidas veces, si hay algo que no sirve, un centavo es caro. Por el contrario, si el precio parece inalcanzable pero está decididamente ligado a la fuerte voluntad de poseerlo, bueno, entonces veremos cómo lo conseguimos. Lo mismo ocurre con las distancias. Ni tan lejos ni tan cerca. Me pasa que quizá no tenga ganas (ni razones) para llegar a la esquina (y eso que vivo a metros de ella!) pero de El Palomar a Castelar sur... pese a la distancia que me separa de mi hogar, no pareciera estar tan lejos si es como Fito propuso continuar las noches de viernes rockeros. Así las cosas, así la vida, así el rock: otro lugar, con la misma gente y la misma onda. Porque aunque el horizonte simule representar lo más inalcanzable, donde haya rock Fitomaníaco, seguiré teniendo la sensación de estar más cerca de la alegría colectiva, que del cordón de mi vereda.
Saludos rockeros.

jueves, 17 de septiembre de 2015

Picnic Familiar 20/9 - Ateneo de don Bosco

Indice de Breves Historias






cumple de Claudia 2015











HAY ROCK (24) Aproximación teórica de la distancia estimada para construir una leyenda. “CLAUDIA”


Aproximación teórica de la distancia estimada para construir una leyenda.

“CLAUDIA”



Tarde o temprano Fito será leyenda cuando se agoten los momentos épicos ocurridos a lo largo de su rockera y exitosa historia. Alguien reunirá anécdotas, irá por los protagonistas, preguntará, transcribirá, y lo transformará en una obra para que repose en un libro llamado a ser un punto de partida para quien quiera seguir los pasos de este sujeto único e irrepetible. Se me ocurren capítulos como: “Fito y el Rock”, “Fito y su relación con el vinilo”, “…el selectivo” “…sus amigos”, etc. Qué cuántos roqueros tendrían algo que aportar? , no lo sé. Pero no habría dos historias ni iguales ni parecidas. La diversidad propone ideas completamente distintas y entonces, nuestras versiones caerían invariablemente en un denominador común: “Fito y su entrega solidaria sin límites”. Con todo, estaría incompleto si no fuéramos capaces de ver más allá del propio mito viviente. Porque –y esto es simplemente una opinión- para llegar hasta donde llegó más la incertidumbre que sugiere el futuro de no saber hasta dónde llegará, habrá que nombrar “al madero que lo mantuvo a flote”, el rol que desempeñó y que se propuso estar ni lejos ni cerca, sino donde tiene que estar el que “da” para felicidad del otro. Y ese otro estuvo en fotos, videos, relaciones, opiniones, decisiones, conducciones, poniendo conducta, temperamento, personalidad, creatividad, originalidad, la vigencia espiritual, la bienvenida sonrisa y vaya a saber cuántas otras virtudes desde el lugar más secreto y desapercibido posible. Porque para llegar a ser lo que hoy es Fito y entender por qué alguien se encuentra próximo a erigirse en una verdadera leyenda, tuvo que haber tenido al menos, una sólida base de sustentación llamada Claudia.
Saludos rockeros.

sábado, 5 de septiembre de 2015

Hay rock (23) El dolor de ser feliz

EL DOLOR DE SER FELIZ



No satisfecho con la paz y alegría reinante que se produce cada viernes en Fitomanía, tal vez inquieto (tal vez no) decidí andar involuntariamente a los golpes. Mi llegada no pudo ser más accidentada. Una vez que el 
remis estacionó frente a "César", bajé de vehículo, saludé al chofer y luego de cerrar con fuerza la puerta del acompañante, olvidé sacar mis dedo índice de la mano izquierda que había quedado atrapada (con qué razón?) en el interior del vehículo, lo que me recordó la importancia de la articulación interfalangiana distal, porque sin tanta terminología médica, eso duele!. A tal efecto, seré prudente y no diré las palabras que dan muerta al idioma castellano en ocasión del agudo dolor que provoca una extremidad a punto de separase del cuerpo. Y lejos de subestimar a nadie, tampoco es cuestión de andar explicando lo que todo el mundo sabe y pronuncia con más pena que gozo.
Como pudo, un amigo del bar (uruguayo él), me hizo las primeras curaciones y casi pude ingresar a la pista de baile. Digo "casi" porque allí me estaba esperando Claudia -compañera de Fito- que con unos claros ademanes de su mano derecha zigzagueando de izquierda a derecha, me estaba esperando para darme una merecida paliza. Qué había pasado?: durante la noche del sábado 29 de agosto (histórico cumple de Fito), olvidé sacarle una foto mientras bailaba con él!. Luego de perdonarme la vida, ingresé y como siempre damos cuenta, fue otra noche espectacular. Bueno casi (otra vez?). Entre muchas damas y en ocasión de bailar con quien dijo tener como profesión Psicóloga, en un repentino movimiento rítmico de su brazo (que no vi venir), una de sus manos alcanzó mi ojo derecho. Enseguida se preocupó y disculpó (toda una dama). Le di tranquilidad, claro. Solo le dije que si veía alguien con tres ojos, uno podría ser el mío. Lo que siguió (todo involuntario, claro) fueron: codazo de Elsa, pisada de Carmen, golpes ocasionales de otras parejas bailando, empujón de la mesera y no sigo con el inventario de infortunios, porque de las múltiples laceraciones recibidas, algunas alcanzaron mi cerebro, que de hecho todavía no puedo precisar si estuve en una rockería o soñé estar involucrado en una lucha grecorromana en situación desfavorable. Pese a todo, sigo pensando que hasta para ser feliz hay que pelearla y como ya se dijo, "si vamos a morir que sea bailando un buen rock and roll" y si es en Fitomanía, mucho mejor!.
Abrazo rockero.

Descripcion de mi Cumple - Por aldo


Cumple de Fito Mania


Por humilde que fuera una expresión que intentara describir la noche del sábado 29 de agosto pasado, caería en una presunta exageración. Quizá una válida lectura posible de aquel que no pudo asistir al Club 13 de Abril. Pero quienes allí estuvimos, rozamos la afectación de los sentidos!. Extraño sábado este. Empujado por un sentimiento colectivo, fuimos protagonistas de algo distinto. Había que verlo a Fito, que esta vez no pudo ocultarse detrás de sus discos y entregarnos su mejor música. Anduvo por las mesas recibiendo brindis en su honor, besos, abrazos, saludos y regalos. Lo que sí, bailó y mucho con un elegante traje justo y necesario para la ocasión. A mí me tocó seguirlo de cerca (al traje no!, a Fito). Con mi Nikon colgada al cuello y una amigable lente 18-55 disparé a quemarropa a cuanto rockero se moviera. Capté a cientos de damas, caballeros y niños dibujando estilos, figuras y movimientos indescifrables con destreza y locura. Sin punto fijo, tuve que asumir riesgos con lo cual voy a decir lo siguiente: es más probable que un corresponsal de guerra eluda una bala, que un fotógrafo no se lleve de recuerdo un souvenirs de moretones por el osado intento de mezclarse entre brazos y piernas, de una fervorosa masa crítica de rockeros que dejando la vida en una pista de baile, pueden hacer de ti (o de mí) una nada en el suelo..
Y ahora es cuando me pongo sospechosamente bíblico: Pensé que como Dios creó al hombre y el hombre a la cámara de foto, sabía (sin haberlo rezado) que tarde o temprano se agotaría la batería. Y así fue!. Porque créase o no (santo milagro Batman!) se apagó la cámara no sin antes registrar la ultima foto grupal!. Y luego si, pude hacer de las mías durante 20 minutos de mi adictivo rock.
Conclusiones: Fito tuvo su merecida fiesta de cumpleaños rodeados de amigos y familia, mientras este rockero las fotos que sin saberlo, siempre quiso tener.
Abrazo rockero.


Aldo